Este disco presenta la enorme intensidad emocional de la música de la Tierra Caliente de México, expresada tanto en los virtuosos violines del río Balsas como en el arpa grande de la Tierra Caliente de Tepalcatepec.
Este disco es testigo digno de la maestría de las cuerdas mexicanas con el arpa y las guitarras percusivas de Veracruz, los sones más valseados y sentidos del Istmo, la picardía de los sones de la Costa Chica y el ritmo zapateado de la música de Tixtla.
Este CD un clásico para cualquier persona interesada en la música tradicional mexicana. Incluye la voz de falsete de Marcos Hernández (integrante de Los Camperos de Valles) en su mejor momento, cuando tenía apenas 17 años, además de las increíbles improvisaciones en el violín a cargo de Aureliano Orta y Heliodoro Copado.